domingo, 19 de julio de 2009

De otras lluvias

Y aunque tú no lo sepas hoy la he visto, cuando escribí sobre este lenguaje común la película era sólo una referencia. Un estudiante, chaqueta: pana marrón, poster: Ché, pelo: largo, camisa: cuadros (leñador no Mondrian), entra en un aula de la España en que aún tiene que Llover a Cántaros. No sé por qué me ha podido más la canción que las imágenes (pero cualquiera menos amable con lenguajes comunes puede saberlo). Y eso que él cierra su balcón mientras afuera llueve con un piano en cada esquina. La he buscado, sí la canción, A Cántaros (1969) de Pablo Guerrero

..."Dame la mano y vamos a sentarnos
bajo cualquier estatua
que es tiempo de vivir y de soñar
y de creer que tiene que llover a cántaros.
Estamos amasados con libertad, muchacha,
pero ¿quién nos ata? Ten tu barro dispuesto,
elegido tu sitio preparada tu marcha."...

No la pongo entera porque estoy intentando asimilar lo de las bioenzimas del final. Ya hablaban de que se acabaría la siesta y vendría una lluvia a limpiar las casas, ¿será esta vez la época de lluvia?. La lluvia anunciaba revolución de paz y de cultivos ecológicos, del fantasma que recorre Europa se habla como de pasada, pero decían que había señales, el caso es que no para de haberlas a pesar de Borges y de que haber no puede ir con lluvia. Pero esta canción como el modelo del tercer hombre, viene de otra, de Dilan, (1963, no podía ser de otra forma), 'A hard rain's a-gonna fall':


...."I met a young child beside a dead pony
I met a white man who walked a black dog
I met a young woman whose body was burning
I met a young girl, she gave me a rainbow
I met one man who was wounded in love
I met another man who was wounded with hatred
And it's a hard, it's a hard, it's a hard
it's a hard,It's a hard rain's a-gonna fall."...

Es un alegato a favor de la religión de los que no creen en política, un canto ecologista - pacifista, que como credo se quedo un poco sin soluciones. El más sencillo camino de quedarse fuera, de elegir al anarquista (léase ecologista) en lugar del comprometido (leáse político). El antiguo juego del divisor de partidarios de cuentos vs partidarios de las novelas y darle a eso categoría de elección permanente. Evitar la necesidad del salto, quedarse en un lado, habitar un hemisferio, ser una tribu, formar un grupo, plantar un árbol, tener un hijo, escribir un. El cuento como mapa exacto, como posibilidad de posibilidades, la novela como territorio abierto, como posibilidad de estar equivocado, como la necesidad (tan presente alguna noche) de que un vaso se pueda morder y no sea eso que se rompa. También sin soluciones la película es la parte más débil de la cadena del lenguaje común, solo a ratos parece que no va a romperse, se pasa las dos horas recayendo, sin poder aprender, como la tía de Julio...


Desde Julio también salieron otros lenguajes comunes, Néstor Sánchez... en una entrevista de 2001, dos años antes de que le alcanzara la épica insoslayable:

"Es que a mí me interesó siempre la novela que se vincula con la poesía. Lo demás no me interesa; digo, la novela como historia no me interesa. Hoy por hoy, sólo se escribe y se lee ese tipo de literatura. Será por eso también que no soy muy leído."

"Es que nunca en mis libros inventé una historia. Todo ha sido en base a mi vida presente o pasada y esto ahora ya no puede ser. Me quedé sin épica. De todos modos pedí prestado algunas novelas célebres y las leo con la remota esperanza de que me motiven. Pero esas lecturas no hacen más que recordarme desde qué punto de vista escribí mis libros, es decir “en contra” de la novela tradicional, procurando que la prosa fuera nada más que una excusa para llegar a la poesía."

“¿Entonces toda memoria, toda memoria personal y por lo tanto apesadumbrada por el sin ton ni son sobreentiende, fundamentalmente, el olvido, la desmemoria?...esa devastadora desmemoria destiempada y desarticulable…” (Cómico de la lengua, 1973)

Tendiendo un puente entre prosa y poesía, una prosa vagabunda, separada por una pared entre dos balcones. Pero cambió de camino y acabó pensando que la actitud política era infantil, adolescente, se cansó de escribir y se vació, "un Horacio sin relato".

A. Benítez Rojo, dejó el Tute de Reyes y lo aplastó contra el suelo por el que no pisaría Robledo, y su Escudo de Hojas secas para enseñar a exiliarse en Massachusetts, viendo el otro lado desde aquel, imaginaba un Caribe sin centro, desde otros lados, pero también que la historia tenía que volver a ser una trama y no un concepto, dicen que él tampoco se lo creía del todo.

Roberto Bolaño, el más claro seguidor, el más esquivo escritor, el escritor político, cómo fuimos asustados ante cinco horas de teatro 2666, quizá que yo espera más y salí menos, quizá él esperaba mucho menos y, pero aún recuerdo a Benno von Archimboldi, nadie sabe quién es aún, pero sí que vimos como piedras de hule los nombres de todas las asesinadas en Ciudad Juárez. Nos llovieron piedras, salimos a sacrificar afuera el paraguas que no teníamos, y sin embargo nos incomunicamos tanto. Dicen que quedó inconclusa porque es asi como debe de, dicen que murió a la izquierda de un roble.

Juan Villoro, que escribe un cuento en el que un avión va dando vueltas porque no hay pista de aterrizaje, no sé si le sobrevuela la necesidad como anoche, o es sólo una suspensión, una espera, un patrón, dijo: "Cortázar fue un autor al que yo leí como libro de autoayuda, con una idolatría absoluta, sin distanciarme de él, queriendo enamorarme de La Maga, irme a vivir a París, fumar tabaco oscuro, oír discos de jazz... Yo quería ser un personaje de Cortázar. Nunca pensé que estaba distanciándome de su escritura. "

Rodrigo Fresán... dice que su deuda con la literatura se la debe a Cheever, Kurt Vonnegut, Dickens, Proust. Dice que eso es después del fin de la inocencia de centrarse en el escritor, asi se ha excentrado. Se reconoce en los Beatles, "primero violines y después, "guitarras" y así sigo". Y en la escritura del de la lluvia salvaje: "Mi estilo tiene mucho que ver con Bob Dylan también: frases largas, oraciones en serpentina con altibajos y curvas, como un electrocardiograma." Sale corriendo cuando le hablan de Julio, no está ni en los "reconocidos" por la velocidad de las cosas.

A Agustín Fernández Mallo reconozco que lo leí una sola vez y luego lo he visto como quien ve algo que tiene que hacer pero le tira para atrás por una de esas intuiciones que no se explican. Lo que leí se parece mucho a una cita que destaca el mismo en su web, como si él hubiera querido ver, y ver, y ver también como los que quisimos tanto a Borges...

"Harold acaba su última caja de cereales, deja conectada su primitiva videoconsola y decide recorrer Norteamérica durante un lustro. Un tipo que maneja las grúas del puerto de Nueva York diseña una casa para suicidas. En Basora, un marine se enamora de una irakí en el instante en que la encañona.Un tal Julio da forma a una Rayuela alternativa. Sandra vuela de Londres a Palma de Mallorca al tiempo que se resuelve el misterio del incendio de la Torre Windsor. El capitán Willard sigue esperando en Saigón aquella misión: nunca imaginó lo especial que sería. Hay gente que utiliza los oleoductos vacíos subterráneos de la antigua Unión Soviética para cruzar las fronteras. Un cocinero proyecta cocinar el horizonte."

He leído que ha elegido matar al padre.

Pero si me dan a elegir, de entre todos los caminos seguidos y más tarde abandonados y luego malqueridos y no me refiero solo a esto de ahora, a esto de esperarte y aleluya encontrarte, y carajo perderte, y volverte a encontrar, y ojalá nada mas me quedo con el sillón Voltaire de Bryce. Y la lluvia violenta y salvaje de mi adolescencia, desde la que escribí versos mucho más tristes y menos sentidos...



Esto lo escribo en mi Vaio blanco, mientras en Sony Tv termina la película tocando el timbre de la puerta que separa un balcón de otro, ya sabemos que para eso hay tablones (lástima el director no), desde una televisión blanca de la misma marca, con letras blancas sobre fondo negro y una musiquita que no alcanzo a, también suena el timbre aqui al lado, hay elecciones que uno hace aunque no lo sepa.

3 comentarios:

Bo Peep dijo...

Hablando de deudas con la literatura, si algún día tuviera que pagarlas creo que tendría que pedirte esas fantásticas maletas que te acompañan, y ni aún así me cabría todo lo que debo.

Alf. dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

un mísero aire que respiro obligada a desquiciarme... un mísero aire que respiro obligada a desquiciarme con tanto deseo seco y quebrado.

y sin embargo...uno, quieto, pesado, muerto, sigue siendo astrolabio.