El sitio de mi paredro

Quizá ya conviniera dejarle sitio a mi paredro. Dejar que esa distancia se cuele entre nosotros y sea nosotros a un tiempo, en un tiempo en que tú y yo ya no lo somos. "Questa o quella" quedó atrás en un tiempo que se hizo eterno aunque ya ni lo recordemos. Entramos en esta época en que el sol nos castiga el alma, la cuadratura de soles se vuelve insoportable, "È il sol dell'anima, la vita è amore..." Toda la vida que quizá fueron 3 días en tres actos pensando en vendetta, tremenda vendetta. Sólo porque la donna è mobile...

Dicen que anteayer se repitió una escena en el Teatro Real, la primera vez en la historia, una historia de 12 años no todos a un tiempo, última escena del Acto III, dúo del "Sí, vendetta". Ya veo a mi paredro pidiendo un bis, y todos los cronopios con sus cabezas verdes, vistos por última y primera vez en algún teatro todos los teatros el teatro Real anoche con Rigoletto

"Lassù in ciel,

vicina a la madre,

in eterno per voi ...

preguerò...

Ah, la maledizione!!!"

Hace unos día ocurrió en el Palacio de Oriente sin bis bajo la lluvia . Dicen que no es común que un barítono destrone al tenor, el bufón al duque. El bufón Leo Nucci tiene 67 años y sólo hizo una representación, ya se sabe que a veces es especial por defincicón lo que sabes que no volverá a ocurrir, como empujar la piedrecita hasta el cielo.

"Era así, la armonía duraba increíblemente,
no había palabras para contestar
a la bondad de esos dos ahí abajo,
mirándolo y hablándole desde la rayuela,

(...) de manera que lo único que él podía hacer era
mover un poco la mano derecha en un saludo tímido
(...) diciéndose que al fin y al cabo algún encuentro había,
aunque no pudiera durar más que ese instante

terriblemente dulceen el que lo mejor
sin lugar a dudas hubiera sido
inclinarse apenas hacia fuera
y dejarse ir"... sin un let it be de más.
"Possente amor mi chiama"...